miércoles, 19 de octubre de 2011

Voy a pasar por la vida una sola vez, por eso, cualquier cosa buena que yo pueda hacer o alguna amabilidad que pueda hacerle a algún ser humano, debo hacerla ahora, porque no volveré a pasar por aquí.






Voy a pasar por la vida una sola vez, por eso, cualquier cosa buena que yo pueda hacer o alguna amabilidad que pueda hacerle a algún ser humano, debo hacerla ahora, porque no volveré a pasar por aquí.
Madre Teresa de Calcuta  (1910 - 1997).

Esta linda frase refleja la importancia de dejar huella en nuestro paso por el mundo.  Y No solo dejar huella de nuestro nombre, sino por el contrario, dejar huella por nuestros actos. La Madre Teresa de Calcuta ha sido la persona más bondadosa de la que he escuchado en mi vida. Somos miles de seguidores en el mundo de sus actos, sus obras y sus frases de consuelo. Su vida ha sido utilizada hasta por un sin número de reinas de belleza que en todo su esplendor soñaban con parecerse a esta Monja, bajita y arrugada dueña de un enorme corazón.

Voy a pasar por la vida una sola vez: La claridad mental de nuestra hermana al entender y saber que nuestro paso por esta tierra es apenas algo pasajero, aunque para los seres humanos un día, una semana o un año puede ser mucho tiempo, para Dios y el universos es apenas un instante.

Por eso, cualquier cosa buena que yo pueda hacer a algún ser humano, debo hacerla ahora: Nuevamente me sorprende la forma de pensar de la Madre Teresa, no solo por comprender lo importante que es hacer algo por alguien, sino por comprender que entregar su vida al servicio de los demás durante su corto paso por la tierra y digo corto porque el tiempo para Dios es apenas relativo, sea un propósito de vida. Ella siempre estuvo ocupada, tal vez muchas veces no tuvo tiempo para nada y de seguro muchas veces estuvo muy cansada y no creo que alguna vez haya estado fastidiada, pero presumamos que si, al fin ella también era humana, sin embargo,  tenía algo diferente en su vida, entendió que su tiempo iba a ser tan corto en esta tierra que fue por eso que decidió entregar lo mejor de su existencia en ayudar a los demás.

Debo hacerla ahora, porque no volveré a pasar por aquí: Es en esta parte donde ella expresa que servir a los demás no solo debe ser un sentimiento, sino una actitud, debe ser algo de acción y no solo de posición. Transforma ese deseo de ayudar en una forma de ayudar y la forma que ella encontró para ayudar a su prójimo fue una sola, entregar toda su vida al servicio del otro.

Existe otra famosa frase del ser humano más importante de la historia de la humanidad, Jesus Cristo, esa que dice: -“Ama a tu hermano como a ti mismo”-. ¿Será que ésta frase solo se quedo en eso, una buena frase?.

Tenemos que preguntarnos si hemos logrado entender el mensaje tan maravilloso que el hijo de Dios trato de reflejar en estas palabras. Ver si para nuestras vidas amar al prójimo es asunto nuestro o creemos que es labor de otros, o que amar a mi hermano como a mí mismo solo es cuestión de la pareja, los hijos, la familia o los amigos en el mejor de los casos. Debemos ver en nuestro corazón qué podemos hacer para ayudar al prójimo y siempre tratar de entregar a los demás lo que tenemos y no lo que nos sobra, comprendiendo que para recibir amor hay que dar amor, que para recibir cosas materiales hay que de alguna forma dar cosas no solo materiales sino espirituales. Aprovechar este paso por la vida, que es corto, y convertir nuestra existencia en algo importante, no con frases ni con actos superficiales sino con ese conjunto de pequeñas acciones diarias que nos inmortalizaran en la vida, si cada uno de nosotros actúa por separado tal vez no se logren grandes cosas, pero si cada uno de nosotros aporta al menos una buena acción solo por hoy, no solo tendremos el resultado de una sola pequeña buena acción sino el resultados de siete mil millones de pequeñas buenas acciones.

Agnes Gonxha Bojaxhiu, Madre Teresa de Calcuta (1910 - 1997), monja de la Orden de las Hermanas de Nuestra Señora de Loreto. Recibió el Premio Nobel de la Paz en el año 1979 por su dedicación a los más necesitados. Fundadora de la Congregación "Misioneras de la Caridad", fue beatificada en 2003.




CITAS

  • Ama hasta que te duela. Si te duele es buena señal.
  • No importa dónde te encuentres, siempre y cuando tengas limpio tu corazón.
  • La oración es el mejor regalo de amor que le puedes dar a todo el que amas.
  • Amo a todas las religiones, pero estoy enamorada de la mía.
  • A veces sentimos que lo que hacemos es tan solo una gota en el mar, pero el mar sería  menos si le faltara una gota.
  • Cada obra de amor, llevada a cabo con todo el corazón, siempre logrará acercar a la gente aDios.
  • Dar hasta que duela y cuando duela dar todavía más.
  • Debemos hacer las cosas ordinarias con un amor extraordinario.
  • Dios no me eligió para tener éxito, sino para ser fiel.
  •  El amor, para que sea auténtico, debe costarnos.
  • La Santidad no es el lujo de unos pocos; es un sencillo deber que tenemos tú y yo.
  • El fruto del silencio es la oración. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz.
  • El perdón es una decisión, no un sentimiento, porque cuando perdonamos no sentimos más la ofensa, no sentimos más rencor. Perdona, que perdonando tendrás en paz tu alma y la tendrá el que te ofendió.
  • El que no vive para servir, no sirve para vivir.
  • La santidad es hacer siempre, con alegría, la voluntad de Dios. Para eso es necesaria la fidelidad a sus deseos, y es esta fidelidad la que hace a los santos.
  • Jesus es mi Dios, Jesús es mi Esposo, Jesús es mi Vida, Jesús es mi único Amor, Jesús es todo mi ser, Jesús es mi todo.
  • Lo que importa es cuanto amor ponemos en el trabajo que realizamos.
  • Mi sangre y mis orígenes son albaneses, pero soy de ciudadanía india. Soy monja católica. Por profesión, pertenezco al mundo entero. Por corazón, pertenezco por completo al Corazón de Jesús.
  • No deis sólo lo superfluo, dad vuestro corazón.
  • No podemos hacer grandes cosas, sólo pequeñas cosas con gran amor.
  • No puedo parar de trabajar. Tendré toda la eternidad para descansar.
  • Nuestra tarea consiste en animar a cristianos y no cristianos a realizar obras de amor. Y cada obra de amor, hecha de todo corazón, acerca a las personas a Dios.
  • Nuestros sufrimientos son caricias bondadosas de Dios, llamándonos para que nos volvamos a Él, y para hacernos reconocer que no somos nosotros los que controlamos nuestras vidas, sino que es Dios quien tiene el control, y podemos confiar plenamente en Él.
  • Para hacer que una lámpara esté siempre encendida, no debemos de dejar de ponerle aceite.
  • Pasamos mucho tiempo ganándonos la vida, pero no el suficiente tiempo viviéndola.
  • Por favor, no maten al niño; nosotros nos ocuparemos de él. ...Por favor, dadme a vuestros niños. Con mucho gusto acepto todos los niños que morirían a causa del aborto.
  • El niño es un regalo de Dios a la familia Cada niño ha sido creado a imagen y semejanza de Dios para cosas más grandes-amar y ser amado.
  • Prefiero ser una gotita de amor, en un mar de amargura.
  • Si en verdad queremos amar, tenemos que aprender a perdonar.
  • Si tu juzgas a la gente, no tienes tiempo para amarla
  • Si una madre puede matar a su propio hijo en su propio cuerpo, ¡qué razón hay para que no nos matemos unos a otros!
  • Sin nuestro sufrimiento, nuestra tarea no diferiría de la asistencia social.


miércoles, 17 de agosto de 2011

…La soledad es un espacio que solo se llena con la presencia de Dios…





 
Juan no sabía que regalarle a su novia para el día de su cumpleaños, finalmente con un trozo de corcho,  le hizo un gran corazón con un agujero en el medio, -“¿Que quiere decir esto?”- Le pregunto la chica. Él mirándola con gran ternura le respondió: -“Raquel tu y yo nos amamos mucho, pero en tu corazón y en mi corazón siempre habrá un agujero, un vacio, una soledad que solo el amor de Dios puede llenar completamente, gracias por colmar mi corazón Jesús”-
Fragmento, Tu me has seducido, Hermana Glenda.


El fragmento de esta canción en principio resume dos cosas, la primera es la búsqueda constante de las personas por buscar el amor con la firme intención de llenar ese vacío que en muchos casos ineludiblemente existe en nuestro corazón y la segunda es la sutil sugerencia de llenar ese espacio solo con la presencia de Dios.

En estos tiempos, parece una constante, ver a muchas personas que se sienten solas y es fácil encontrar a hombres y mujeres en una constante búsqueda de llenar ese espacio de soledad que permanece persistente en sus corazones. En algunos momentos, aunque se esté rodeado de muchas personas, padres, hijos, amigos, familiares, existe una sensación de soledad que al parecer no desaparece. Nos preguntamos por qué, que es lo que hace que exista ese hoyo en nuestros corazones, ese agujero que cada día se hace más y más grande.

Esta sensación de vacío generalmente nos lleva a cometer algunos errores comunes, como el consumo de alcohol, drogas, juego y otras tantas que en vez de llenar ese espacio ayuda reiteradamente  a hacer el agujero más grande. Sin embargo, también existen personas que no dirigen sus acciones para llenar ese espacio vacío en los vicios, por el contrario, tienen una vida sana, ordenada y sobria, y aunque estén rodeadas de mucha gente, con sus parejas, amigos y familiares etc.,  ven que al final del día en medio de sus reflexiones llega esa sensación de soledad. Al sentir esa sensación y ver que nos acompaña día a día, nos preguntamos constantemente, por qué, qué pasa,  por qué existe ese sentimiento.

Depende de cada quien como manejar esa sensación de soledad, las decisiones que se toman para llenar ese espacio vacío es particularmente decisión de cada quien, pero mi consejo en el día de hoy, es buscar la presencia de Dios. Él es el único que puede con su inmenso amor llenar ese agujero, llenar ese vacío que nos acompaña. Acercarnos a Dios a través de la oración es la maravillosa forma de opacar ese espacio vacío, realizar un acercamiento diario a Dios, entablar una conversación sincera con él, entregándole todas nuestros problemas y dificultades, nuestras alegrías y tristezas, nuestras metas y fracasos, nuestros sueños y actitudes, para que él actué en nuestros corazones y en nuestras vidas.

-“Dios yo te necesito, te abro las puertas de mi vida y recibo como mi señor y salvador, gracias por perdonar mis pecados, toma el control del trono de mi vida, te pido que me acompañes en mi casa, en mi trabajo, en mi estudio y en mi familia, guíame por tu camino y permíteme ser feliz cada segundo de mi vida, no dejes que la tristeza invada mi corazón y ante cualquier evento que nuble mi vida permíteme salir victorioso, dame serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, permíteme sobreponerme ante la adversidad y aprender cada día de mis errores, ayúdeme a ser hoy mejor persona que el día anterior y haz de mi esa persona que tu quieres que yo sea”-.





domingo, 17 de julio de 2011

La envidia es mejor despertarla que sentirla





La envidia es mejor despertarla que sentirla. Ese era el slogan de un comercial de TV de un champú para el pelo a principio de los años 90 en Colombia. Al parecer en creativo sabia identificar en realidad que es la envidia y con este seductor juego de palabras creó un excelente slogan (para el mundo de la publicidad y la creatividad) que generó una importante recordación en la ciudadanía colombiana.

La envidia ha sido en toda la historia de la humanidad motivo de grandes batallas, grandes movilizaciones y enormes miserias. Al precede la envidia desde los dioses del Olimpo han motivados estos hechos desastrosos en nuestra historia.

La iglesia Católica, para quienes tuvimos una educación bajos los preceptos de la iglesia, considera a la envidia como un pecado capital y dentro de esa formación la sataniza casi inculcando con culpabilidad a quien es dueño de este sentimiento. El Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, señala en su significado a la envidia como tristeza o pesar del bien ajeno y/o emulación, deseo de algo que no se posee. Para las personas, es precisamente esa inagotable tristeza por el bien de otro, lo que consume su vida, esa desesperación por los bienes que posee el prójimo y la aparente carencia de los propios, transformando esta desesperación en un agujero que perfora el corazón y que cada vez se hace más grande. La envidia actúa de tal manera en la vida de una persona que corroe lo mejor de su ser hasta el punto ver muchos casos en los que no se genera por el deseo de algo que no se posee o el inmenso sentimiento de carencia, sino por el odio de ver que existe cualquier ser humano que es capaz de poseer algo que yo no poseo.

Existen algunas circunstancias en los que se entiende a la envidia como algo propio de las personas que poseen poco dinero o de clases económicas menos favorecidas, pero en el fondo esto es una hipótesis falsa, ya que existen innumerables personas con poder y suficientes recursos económicos para emprender acciones en contra de aquellos a los cuales envidian.

Es aquí en donde nace un interrogante, si la envidia no es propia de la carencia de poseer algo físico que alguien más posee, ya que en el caso de alguien adinerado simplemente con comprarlo ya basta, ¿por qué existe la envidia?.

Esto es un cuestionamiento de nunca acabar, ya que desde la educación, donde nos presentan a la envidia como un pecado capital y en la sociedad donde nos informan como algo negativo, se olvidaron decirnos que sentir envida es algo propio del ser humano, es algo tan inherente que negarla es como negar que somos seres racionales. No creo que exista ninguna persona en el mundo que nunca haya sentido envidia de alguien o de algo, incluso ahora es muy común escuchar una famosa frase que reza –“me da envidia pero de la buena”- que trata en resumen confirmar en cierta forma que sentir envidia es algo tan normal como sentir calor, o tristeza.

El problema con la envidia no se da cuando se envidia a alguien, por el contrario, se da cuando esta se convierte en algo enfermizo, en algo que nos perjudica, que nos hace daño, en algo en donde el querer poseer nos supera y nos domina, y  las complicaciones y los hechos perjudiciales se presentan cuando se transforma en sentimientos negativos de mayor proporción que domina nuestros actos y nos motiva a hacer cosas para atacar a quienes sentimos que nos hacen daño, no es el sentimiento en sí, sino lo que yo hago frente a esas situaciones y como manejos las actitudes que me genera ese sentimiento. A veces se confunde a la envidia o a la persona envidiosa por sentimientos negativos, de rencor u odio, pero olvidamos que en muchos casos se disfraza de una búsqueda desesperante e inalcanzable de ser mejor que el otro, de tener más que mi semejante o de demostrar que soy mejor que el de lado, por eso se habla de la carencia de algo, no solo lo material.

Tal vez hablar de un secreto para superar la envidia sería algo arriesgado, sin embargo, si en la educación de los niños y jóvenes se enseña que este sentimiento es algo que del que ningún ser humano esta exento y que cualquiera puede ser “victima” en donde no sea satanizada sino por el contrario entendida, se podría brindar herramientas más efectivas para que nuestros niños y jóvenes comprendan que el secreto está en no dejar afectarnos por este sentimiento y como manejamos estas situaciones.

Y recuerden: -“Envida es mejor despertarla que sentirla”-







jueves, 20 de enero de 2011

…Todo parece indicar que para el ser humano la vida se basa en 4 palabras: -“Nunca nada es suficiente”-….


…Todo parece indicar que para el ser humano la vida se basa en 4 palabras: -“Nunca nada es suficiente”-….

Las personas nos encontramos en una constante búsqueda de consumo y no hablo solo de consumo material, que en los últimos tiempos se ha convertido casi en un motivo de vida, sino también en un consumo desorbitado para el alma. Siempre estamos en búsqueda de algo, tal vez de satisfacción, buscamos ser amados y nos olvidados de amar, buscamos ser aceptados y nos olvidamos de aceptar. Al parecer  en  muchos  aspectos  somos  infelices y eso se debe casi principalmente en que no agradecemos por lo que tenemos sino que nos quejamos de lo que no tenemos. Es una queja constante y sistemática de insatisfacción de lo que nos falta, porque siempre y en todo momento nos hace falta algo, si compramos un celular a los dos meses nos estamos quejando porque no tenemos el nuevo modelo y nos quejamos aún más porque el modelo que tenemos es obsoleto y pasado de moda, pero no nos detenemos a agradecer por la maravillosa posibilidad de tener un celular.

Todo parece indicar que para el ser humano nunca nada es suficiente, pero como todos los extremos son malos, esto no está del todo mal, tampoco podemos caer en el conformismo miserable, ese que acepta las pocas cosas que tenemos y no hacemos ni el más ínfimo esfuerzo en mejorar nuestra calidad de vida.

Entonces el dilema será tener o no tener, comprar o no comprar, buscar o no buscar, aspiro a tener cosas, objetos y actividades que mejoren mi calidad de vida o simplemente entramos en una onda de total conformismo de acuerdo a lo poco que obtenemos de la vida.

La decisión que es única y personal parece que nos confunde, muchas veces culpamos a nuestra posición económica de la infelicidad de nuestras vidas argumentando en cierto sentido que si tuviéramos dinero nuestras vidas serían mejores. Si esto fuera así, si el dinero fuera garantía de felicidad ¿por qué existen tantos millonarios infelices?.

Para esto cuál es la solución, tener dinero no es garantía, ser pobre tampoco es garantía, entonces será ¿ser de clase media, ni rico ni pobre?.

Si acertáramos no solo a buscar desesperadamente la satisfacción personal en el dinero, en poseer, en tener y en acumular, sino aparte de esto en compartir, en entregar y en dar, esto tal vez podría acercarse a la felicidad. Buscar ser felices si los que están a nuestro lado lo son, buscar el dinero si los que nos rodean también lo tienen, lograr que nos amen solo si aprendemos a amar, buscar el amor de Dios si nosotros aprendemos a amarlo a él.

Parece una utopía fácil de lograr en las palabras y en el papel, pero si por el contrario tratamos de cambiar esa desesperada búsqueda de satisfacción fundamentada en que “nunca nada es suficiente” por un tranquilo encuentro de “agradezco inmensamente lo que tengo”, empezando por agradecer por nuestras vidas, agradecer por nuestras familias, por nuestros padres, nuestros hermanos, nuestros amigos, encontrar en cada detalle que la vida nos proporciona el camino a la felicidad y no solo a una felicidad efímera más bien a una felicidad duradera y permanente.

Recordemos que la invitación no es olvidarnos de tener o no comprar por el contrario es a tener cosas que mejoren nuestra calidad de vida, esos gustos que nos proporcionan grandes satisfacciones y pequeñas victorias diarias, y pedir con las todas las fuerzas del corazón al Dios de la vida para que nos de esas cosas que materiales nos brindan alegrías, como tener el MacBook Pro, Ipad, TV 42 pulgadas LED 3D, Nintendo Wii, Blackberry Touch, Blu-Ray, laptop, ropa de marca, auto de lujo, apartamento, viajes y todas las cosas que queramos, pero no olvidemos definitivamente en compartirlas y compartir gestos más loables como una llamada, una visita, un te quiero, una canción, un consejo, un libro, un chiste, con las personas que nos rodean, ya que generalmente pensamos que a quienes queremos lo saben y por eso nunca se lo decimos, a veces y de vez en cuando es bueno no solo decirlo sino demostrarlo.